Durante la época de estudios se incentiva a llevar una publicación que persigue informar a los estudiantes del establecimiento, sobre lo que ocurre, de una clase, lo que se piensa en el modelo educativo. También se publican creaciones de los alumnos como: cuentos, dibujos, poemas, cómics, entrevistas, etc. También se publican creaciones de los alumnos como: cuentos, dibujos, poemas, cómics, entrevistas, etc.
El Colegio para varones San Sebastián, no se queda atrás en este sentido, delegándose a los alumnos del último año, la organización y responsabilidad de sacar avante una publicación de este tipo. Desde muchos años atrás se adoptó el nombre “NUESTRO GUIA”, y que ha destacado en el tiempo para llegar a ser calificado como el Decano de la prensa escolar, por su antigüedad y ejemplo modelo.
La integración de una directiva que se hiciera cargo de diversos aspectos de la organización, se hizo en mi época, (año 1972) por medio de una propuesta que preguntó de quienes querían colaborar, varios levantamos la mano y por decisión del conglomerado de la clase se escogió por votación al compañero Oscar Ricardo Valdés Ruiz como director, y luego se escogió al staff de apoyo, de acuerdo a las experiencias y capacidades que habían manifestado durante el ciclo de vida escolar, aspectos que para todos destacaban.
Sacar avante durante 10 meses esta publicación, sin relación con las notas de calificación, conlleva dificultades, sacrificios y temores de incumplimiento, dado que en muchos casos no se contó con la colaboración de la clase, en cuanto a elaborar artículos o información que fuese relevante para publicarse e informar a todas las familias que integran el Colegio.
Fuimos un grupo de seis o siete los que pusimos todo nuestro empeño de forma constante, a veces desvelándonos por los artículos, por las fotos o por los dibujos, especialmente de la portada a cargo de Exal Rene Juárez.
Recuerdo a Carlos Avalos y a Juan Francisco Corado llevando el montón de papeles, bocetos, fotografías para ordenarlos y entregarlos a la imprenta, siempre había instrucciones de Oscar el director. Los otros eventualmente, consiguieron patrocinio con anuncios, las fotografías fueron tomadas con esmero, aunque no todas podían publicarse por cuestiones de presupuesto.
Y a mí como Sub-Director, me correspondió escribir, columnas de opinión dirían ahora, fueron una serie de diez artículos que expresaron de todo empezando a referirme a la “Juventud Divino Tesoro”, Saludando eventos de ocasión como la Semana Santa y sus enfoques, “Madre y Educación” de su amor por los hijos y su interés en que reciban una orientación acorde, pasando por “Rebeldía: ¿Igualdad de Derechos?” donde destaque razones del comportamiento de los muchachos, por último termine con destacar “Un Bello Final”, agradeciendo a Dios, a nuestra Directora, a todos los maestros, la educación recibida, el dolor de dejar el recinto de muchos años, y a mis compañeros.
Fue muy grato, ser parte de este grupo de trabajo, me inculco la responsabilidad de cumplir metas participar en equipo, a pesar de los desvelos de tres o cuatro noches seguidas reescribiéndolos (para que quedaran decentes digo yo), cuando debía entregar el producto. Agradezco haber tenido esta oportunidad.